domingo, 24 de febrero de 2013

Declaración de La Corriente-CEPA Capital Federal. 23/2/2013


Defendemos las banderas populares y antiimperialistas
Seguimos luchando por la
liberación nacional y social
POR LA EDUCACIÓN Y LA UNIVERSIDAD DEL PUEBLO LIBERADO

El 2012 fue un año de importantes luchas obreras y populares que enfrentaron las políticas del kirchnerismo y del conjunto de las clases dominantes, como contra la megaminería, frente a la masacre de Once o las luchas del movimiento de mujeres. En la Ciudad, frente a los acuerdos del kirchnerismo y el macrismo, se destacaron las tomas de los secundarios, el paro histórico de 10 días de los trabajadores del subte y las luchas contra los negociados inmobiliarios. Y fundamentalmente el paro activo con cortes de ruta del 20 de noviembre, el primer paro general durante el kirchnerismo, protagonizado por miles de trabajadores. El Gobierno sigue con la infamia del impuesto al salario en vez de cobrarles más impuestos a los monopolios, terratenientes y bancos. La CGT de Moyano, la CTA y otras organizaciones toman el reclamo contra el impuesto a las ganancias y otras reivindicaciones. Moyano impulsó el paro, aunque sus posibles acuerdos electorales con candidatos como Scioli, Massa o De la Sota no van en este sentido, ya que éstos también sostienen el impuesto al salario y ajustan en sus provincias. Pero para los que peleamos por un camino liberador, lo importante con el paro del 20 de noviembre fue que se puso en marcha el protagonismo de los trabajadores y que emerge una corriente clasista, como por ejemplo los petroquímicos de Bahía Blanca. En Capital, los estudiantes con la FUBA confluimos marchando al Ministerio de Educación. En este nuevo escenario, hay condiciones para confluir desde un programa independiente y que se imponga desde abajo un nuevo paro nacional de 36hs. Este lunes 25 de febrero se inicia un paro nacional docente contra los topes salariales del Gobierno.
El kirchnerismo mantiene un presupuesto insuficiente para las universidades y la educación. Con la inflación y la falta de políticas de bienestar estudiantil como el boleto educativo, y hasta el reciente recorte de becas, a miles de estudiantes se nos dificulta seguir estudiando. El Gobierno mantiene vigente la LES menemista y sostiene una fuerte ofensiva con la CONEAU y el INFOD, buscando moldear los planes de estudio a las necesidades de un modelo sojero-minero exportador, en beneficio de monopolios y terratenientes. También impulsa los fondos-soborno de la megaminería. Toda esta política, con el acuerdo y subordinación de la gran mayoría de los Rectores. Importantes luchas le vienen haciendo frente a estas políticas. En la Ciudad de Buenos Aires el Estudiantazo de 2010 mostró un camino, desbordando el escenario de polaridad política entre el macrismo y el kirchnerismo y logrando importantes conquistas. Al calor del Estudiantazo, las luchas de Exactas, Ingeniería y Arquitectura que vienen frenando a la CONEAU y las de los terciarios contra el INFOD, golpean a esos pilares de la política universitaria del kirchnerismo y las clases dominantes. 
En el último Congreso de la Federación Universitaria Argentina fue importante la conformación del Frente 20 de Diciembre para potenciar la lucha estudiantil, derrotar las maniobras divisionistas del kirchnerismo y avanzar en el camino de recuperar la FUA de manos de la Franja Morada.
Estamos en un momento de cambios, en la Argentina y en el mundo. La crisis del sistema capitalista imperialista pone en evidencia para millones las lacras de este sistema. Y al calor del impacto de la crisis en nuestro país, muchos de los que votaron a Cristina Fernández de Kirchner en el 2011 empezaron a desencantarse con la Ley Antiterrorista, la inflación, la megaminería, el impuesto al salario, la masacre de Once, la ley de ART, los acuerdos con el macrismo en la Ciudad, los topes salariales en paritarias, etc. Muchos salen a la lucha por sus necesidades y buscan un camino.
Lejos de los discursos, el kirchnerismo llevó a una profundización de la dependencia, con eje en la exportación de soja, la minería y el negocio automotriz, y pagando la deuda externa. El modelo “nacional y popular” del Gobierno es con precarización laboral, ajuste inflacionario y criminalización de la protesta. Sin cuestionar lo principal del “modelo”, sectores opositores buscan un recambio por arriba, con candidatos bendecidos por Clarín, La Nación o la Sociedad Rural. Ambos, Gobierno y derecha opositora, pretenden imponernos su propia disputa como la contradicción principal, y trabajan para cooptar y dividir a los dirigentes y las organizaciones populares.
Para avanzar en un camino de liberación nacional y social es necesario construir un reagrupamiento popular, antiimperialista y antiterrateniente que enfrente la política del Gobierno Nacional kirchnerista y le cierre el paso a las otras variantes de las clases dominantes.
                                                 
Los debates en la CEPA
En el marco de esta situación, en los últimos años se fueron agudizando las diferencias dentro de la CEPA. Desde la dirección nacional se fue impulsando e imponiendo, en muchos casos mediante hechos consumados sin discusión, una línea que abandona el carácter popular y antiimperialista de la CEPA, agudizando debates y produciendo hechos que fueron llevando a una división política:
• En el Plenario Nacional de septiembre de 2010 esta línea fue sintetizada por el coordinador nacional de la CEPA como: “contra el kirchnerismo hay que juntarse hasta con el Diablo”. Coherentes con esto, en ese mismo plenario, el coordinador y otros miembros de la dirección nacional de la CEPA intentaron que no se incluyera en el documento una crítica a la Franja Morada por votar los fondos de la megaminería y promover causas a estudiantes en varias facultades.
• Bajo esta línea ya se había constituido el Frente electoral de la CEPA y la Franja Morada en San Juan (Junio 2010). El mismo contó con el aval tanto del Coordinador Nacional de la CEPA como de la Mesa Nacional de la Franja Morada (ver). El programa del frente se centraba en “correr de la Federación, Centros de Estudiantes y Consejos a todas las organizaciones oficialistas”, y el afiche planteaba Nosotros tenemos un proyecto de universidad, vos tenés tu voto”. (ver -en la pag. 12-) ¿Qué proyecto de universidad se podrá compartir con la Franja Morada que impulsa la CONEAU, las causas a estudiantes y los fondos de la megaminería?
• Las diferencias con respecto a la Franja Morada también se expresaron en el último Plenario Nacional de la CEPA del 2012. El Coordinador Nacional propuso un documento que nuevamente sembraba expectativas en la Franja Morada como dirección de la FUA: “El congreso abrió una nueva situación en la FUA que debemos analizar. La Franja debilitada tuvo que cambiar su política de los últimos congresos (invitó a la Apertura a Michelli de la CTA y realizó las comisiones abiertas a los estudiantes). Luego del Congreso empezó a reunir periódicamente a la Ejecutiva y la FUA comenzó a tomar un rol opositor y más vinculado con los sectores en lucha. Esto también tiene que ver con los cambios políticos que se están desarrollando”. Ante el debate en las Comisiones, finalmente se tuvo que aceptar la siguiente formulación: “El congreso generó algunos cambios en la dirección de la Franja Morada que debemos analizar, enmarcados en el intento del gobierno de fracturar la FUA y su disputa por arriba con el kirchnerismo. Por ejemplo que hoy la FUA sea parte de la convocatoria junto a organizaciones populares de un paro nacional para octubre. Tenemos que aprovechar esa situación en función de la lucha estudiantil, sin depositar ninguna expectativa en la Franja, desbordando desde abajo y trabajando para barrerla de la conducción de Centros, Federaciones y la FUA para transformarlos en verdaderas herramientas de lucha y participación estudiantil”.
• Sin embargo, dos meses después el Coordinador Nacional de la CEPA fue protagonista de un encuentro y conferencia de prensa organizada por la Franja Morada desde la conducción de la FUA con los bloques de diputados de la UCR, un sector del FAP y la Coalición Cívica. Utilizando el reclamo del recorte de becas, el encuentro-conferencia fue parte de los actos de lanzamiento conjunto de esas fuerzas para las elecciones 2013, usando la firma de la FUA para ese fin. Las fotos junto a Alfonsín, Gil Lavedra y los principales dirigentes de la Franja hablan por sí solas (ver).
• En el último plenario también se manifestaron votaciones divididas en torno a cuál era la manera de confluir con la marcha que convocarían la CGT, CTA, FUA y otras organizaciones para el mes de octubre. Desde la CEPA de Capital planteamos “confluir desde un programa independiente y con las formas que mas convengan, respetando los procesos de masas”. En la marcha, la dirección nacional llevó a la CEPA tras una  pretendida columna de la FUA que en los hechos eran solo unas cuantas banderas de la Franja Morada. Desde La Corriente-CEPA de Capital marchamos con la FUBA y los Centros de la UBA.
• Otro debate se desató a partir de la invitación a Juan Carlos Alderete al campamento nacional de la CEPA (enero 2012), a pocos días de su participación en la cena en la Sociedad Rural organizada por la Fundación Alvarado del pool de siembra El Tejar. En esa Cena, Alderete dio una charla junto al presidente del Banco Santander, al presidente de Garbarino y a Mariano Alvarado de El tejar, donde defendió una relación de años con el grupo Alvarado y anunció la construcción de una sucursal del Banco Santander por parte de las cooperativas de la CCC ante el aplauso de cientos de representantes de monopolios y terratenientes (ver).
En el campamento el coordinador nacional defendió la invitación a Alderete transmitiendo una versión falsa de los hechos de aquella cena. Desde la regional de la CEPA Capital, junto a compañeros de otras regionales, objetamos la invitación, pero en la Mesa Nacional fue ratificada. Posteriormente, en la charla, Alderete afirmó frente a 400 estudiantes “Yo no me senté a cenar con nadie. Cuando me di cuenta en ese momento que había cometido un error gravísimo, ni siquiera me senté, me fui, me fui callado sin saludar ni siquiera a los compañeros de Renacer” (ver). En los meses sucesivos al campamento, no solo se conoció un video con los hechos de la Cena que desmentía a Alderete y al coordinador nacional de la CEPA, sino que se concretó efectivamente la construcción del Banco Santander por parte de las cooperativas de la CCC y avanzó la del Centro de Integración Comunitaria en el Barrio René Salamanca financiado por la Fundación Alvarado.
En diciembre de 2012, cuando todos los hechos ya eran conocidos, desde la CEPA Capital planteamos en la Mesa Nacional realizar una autocritica por la invitación a Alderete al campamento. No solo se desechó esto sino que se resolvió, por primera vez en 20 años, no realizar el Campamento Nacional, evitando que todo esto pudiera ser discutido por los compañeros de todo el país.
• Otro tema en el que se manifestó el retroceso político e ideológico de las posiciones de la CEPA fue alrededor de las cuestiones de género. Por ejemplo la realización en el Campamento de la CEPA del 2011 de un “desfile” que reprodujo los peores estereotipos de las clases dominantes sobre la mujer, la homosexualidad, etc. O la reivindicación de las canciones abiertamente sexistas en las fiestas de los Campamentos. Como reacción a estos contenidos, en el Campamento del 2012 una gran parte de las compañeras y compañeros realizamos un mural y debate colectivo sobre las formas de violencia hacia la mujer. Finalmente, en el plenario Nacional de 2012, se resolvió por mayoría no incluir la triple consigna “Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir” en las resoluciones del Plenario. El Coordinador de la CEPA impulsó esa resolución y se generó una fuerte división en el cierre del Plenario, quedando muchos compañeros de distintas regionales muy preocupados por esta resolución. La triple consigna es parte fundamental del movimiento de mujeres en la Argentina y programa imprescindible en el camino de la liberación nacional y social. Su abandono por parte del último plenario nacional también muestra hasta qué punto se puso en cuestión el carácter popular y antiimperialista de la agrupación.
Todos estos hechos y debates evidencian que desde la Dirección Nacional de la CEPA, en lugar de promover una línea de frente popular y antiimperialista de oposición a los K, se ha impulsado e impuesto una línea de frente opositor “anti-K” en alianza con otros sectores dominantes. Esta línea muestra una gran debilidad para desatar la lucha estudiantil y enfrentar concretamente la política universitaria del kirchnerismo y las clases dominantes, por ejemplo el avance de la CONEAU en varias Universidades del país.

Defender las banderas populares y antiimperialistas
La línea impulsada por la dirección nacional de la CEPA no se corresponde con las necesidades actuales del movimiento estudiantil y popular y con los objetivos con que fue fundada la Corriente Estudiantil Popular Antiimperialista. Objetivos históricos que expresaron Santiago Slonimsqui, Rodolfo Kempf y Guillermo Caporaletti, Coordinadores Nacionales de la CEPA desde su fundación en 1991 hasta el 2009, en el acto por los 20 años que realizamos en el 2011. Como consecuencia, en la CEPA se fue generando una creciente división política.
Tanto los que entran en el chantaje del Gobierno de que enfrentar sus políticas es “hacerle el juego a la derecha” como los que impulsan un frente opositor “anti-K” junto a otros sectores dominantes parten de la misma base: el escepticismo en cuanto a la posibilidad de la liberación nacional y social y la desconfianza en la fuerza de los estudiantes, los trabajadores y los demás sectores populares para empujar un camino independiente. Nosotros confiamos en la fuerza y en la organización independiente de nuestro pueblo y militamos para desatar la lucha estudiantil por cada una de nuestras reivindicaciones en todos sus aspectos, recuperando los Centros y Federaciones. Y desde ahí confluir con todos los sectores populares, para ir construyendo un reagrupamiento popular, antiimperialista y antiterrateniente, independiente de las clases dominantes, que enfrente la política del Gobierno de los Kirchner y le cierre el paso a las otras variantes de los de arriba. Así es posible acumular fuerzas para una salida revolucionaria de liberación nacional y social, para una Universidad y una educación popular, científica y democrática, del pueblo liberado.
Rechazamos la política que lleva adelante la dirección nacional de la CEPA y defendemos las banderas de un movimiento estudiantil popular, antiimperialista y antiterrateniente. Llamamos a todos los compañeros a protagonizar estos debates en cada agrupación.
Vamos a un año de importantes luchas estudiantiles y populares, y tenemos que ser cada vez más los que empujemos este camino. Junto a los jóvenes trabajadores, del movimiento cultural, de los barrios, junto a Abran Paso y los comunicadores populares, junto a Insurrectas y el movimiento de mujeres. El movimiento estudiantil argentino necesita una fuerza estudiantil que, como planteó Jorge Rocha, Presidente de la FUA del Cordobazo, luche “por un país sin dependencia extranjera ni minorías que vivan a costa del trabajo del pueblo” y por la educación y la Universidad del Pueblo Liberado.
                                
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